Después de varios meses comentando en el blogg, hemos querido trasmitir nuestros conocimientos, las ideas que hemos tenido cada uno de nosotros/as y por ello ha llegado el momento de despedirnos y decir adiós. También agradecer a nuestra profesora María Sara que hemos disfrutado y aprendido muchísimo de sus clases tanto dinámicas como teóricas y a la clase en general ya que cada uno/a venía de un grupo distinto (A, B y C) y la verdad que hemos congeniado muy bien y sobre todo hemos hecho muy buenas amistades. Esperamos que os haya gustado.
El musicograma fue creado por el pedagogo Jos Wuytack para enseñar a escuchar música clasica a los más pequeños.
Son gráficos o dibujos que representas diferentes elementos que intervienen en una obra musical (ritmos,frases,timbres,compases, etc.). Ayudan a que los niños y niñas comprendan mejor la música, y sobre todo a mirarla y escucharla de forma activa. Los musicogramas no sustituyen a la partitura convencional, sino que es una herramienta/recurso que podemos usar para complementarla.
Algunos de los beneficios que tiene su puesta en práctica, son:
-La visualización de la obra de forma globalizada y sencilla, facilitando la comprensión, el seguimiento y análisis de la obra.
-Se considera un recurso didáctico que potencia la atención de los más pequeños, y se utilizan con frecuencia en las clases de música para infantil y primaria.
-Favorece la posibilidad de trabajar en gran grupo, pequeños grupos o incluso de forma individual.
-El alumnado que carece de formación musical y que por consiguiente, no saben leer sobre partitura, gracias a este recurso pueden entender una representación visual más general de la forma y los materiales.
-Una vez aprendido, puede practicarse por iniciativa propia. Esto potencia la creatividad y la imaginación, al mismo tiempo que aprenden de una manera significativa conceptos básicos sobre la música, como el pulso, ritmo, timbre, tempo, etc.
Las obras más utilizadas para la realización de musicogramas suelen ser músicas clasicas, como, por ejemplo, "Las cuatro estaciones de Vivaldi", en concreto la primavera, aunque también podemos utilizar clásicos modernos, como bandas sonoras de Disney o canciones populares.
Además, podemos crear los musicogramas partir de diferentes materiales y recursos, ya sea a mano o a ordenador. Siempre aportando un toque de imaginación y creatividad para conseguir así captar aún más la atención de los niños y niñas, y al mismo tiempo que lo vean como un momento divertido y motivador.
Con motivo al taller que se organizó el pasado 14 de Mayo en
el edificio Constitución 1812 de la Universidad de Cádiz sobre percusión he
decidido contar en este post una experiencia personal que he vivido en el
centro de prácticas C.E.I.P Camposoto (San Fernando).
El centro cuenta con unas instalaciones prácticamente nuevas
debido a su pocos años de construcción pero debido a las subvenciones a las que
están sujetos por parte de la Junta de Andalucía debido a ser un centro
público, cuentan con muy pocos recursos materiales para la enseñanza y
diversión del alumnado.
Para el ciclo de educación Infantil, el centro no cuenta con
un patio para los más pequeños teniendo que compartir en los inicios la misma
zona de patio los alumnos de primaria y los de infantil. Algo que era
totalmente inviable debido a la gran cantidad de niños/as que se juntaban en
una zona no muy grande y la diferencia notable de edad que ponía en peligro la
seguridad del alumnado.
Por esta razón el centro tomó la medida de adaptar un
aparcamiento destinado a los vehículos de los docentes para crear una zona
habilitada para el patio de educación infantil. Esta propuesta se lleva a cabo
hoy en día aunque cuenta con un gran inconveniente, es una zona en la que no
existe zona de sombra y no hay ningún recurso material donde los niños y niñas
puedan jugar.
El AMPA, concretamente algunas familias de los alumnos
de educación infantil toman la decisión junto con las docentes de este ciclo el
crear una zona abandonada del centro para crear un pequeño patio donde a través
de recursos reciclados se creen materiales para los niños y niñas poder
disfrutar en él.
En esta imagen se
puede ver el espacio que se ha utilizado para la creación de este patio de
educación infantil el cuál antes estaba abandonado y ahora gracias a la
colaboración de las familias, docentes y algunas empresas colaboradoras se han
obtenido materiales reciclados para la creación de muchos recursos convertidos
en diversión para los niños y niñas.
La última incorporación a este patio ha sido una pared
destinada a instrumentos musicales creados completamente con utensilios y
materiales reciclados como son: ollas, sartenes, tuberías, palos de madera,
etc. Todos estos instrumentos creados pertenecen a la familia de instrumentos
de percusión y es un lugar dentro del centro donde los alumnos/as pueden
disfrutar de la música experimentando mediante estos materiales. La idea ha
causado una gran admiración por parte de las familias al ver el resultado y los
niños y niñas de educación infantil pueden disfrutar de este patio lleno de
materiales reciclados que gracias a la colaboración de las familias y el
centro, concretamente las docentes de educación infantil han creado un espacio
musical donde los alumnos/as además de divertirse, pueden utilizar este recurso
para la enseñanza de la didáctica musical y realizar actividades de percusión. El objetivo principal de la creación de este recurso es desarrollo de una sensibilidad ambiental a través de iniciativas artísticas, abordando el reciclaje de envases y vidrio a través de creaciones participativas que fomenten la sensibilización y la acción individual y colectiva hacia el reciclaje y el fomento de la sostenibilidad.
En este vídeo, se puede observar como ha quedado finalmente este
espacio musical en el centro.
Por último dejo este vídeo en el que se ve como se ha creado
un instrumento de percusión denominados musicales
el cuál está afinado de oído cortando los tubos de diferentes tamaños hasta
conseguir crear la escala musical con ellos de DO a DO.
Se puede ver cómo se puede hacer sonar golpeando uno de sus extremos con una
El pasado 14 de mayo tuvo lugar el taller de percusión “recapacicla” en el edificio Constitución de 1812 (Campus de Cádiz) en horario habitual de clases.
Dicho taller consistió en fabricar instrumentos de percusión a través de materiales reciclados como botellas, tapones, latas, envases, etc que nos ofrecieron allí, aunque también teníamos la posibilidad de llevar materiales de casa para así contar con más recursos para la realización del instrumento.
En primer lugar, tuvimos una charla acerca de la importancia del reciclaje donde además nos mostró diferentes ejemplos e ideas sobre los instrumentos que podíamos realizar hechos por otros alumnos/as y posteriormente, bajamos al patio principal para construir el instrumento y cada persona se encargó de realizarlo con los materiales que teníamos y adaptándolo a aquello que queríamos hacer. Una vez que todos lo construimos, antes de marchar tuvimos la posibilidad de conocer los instrumentos del resto de compañeros así como el sonido que emitían los instrumentos creados.
Concretamente, en nuestro grupo creamos un palo de lluvia con tubo grande cartón con piedras y tapones de cervezas por dentro para que sonara, una guitarra con tanza y sonaba bastante bien y un sonajero con dos cucharas pequeñas, un recipiente cerrado y arroz dentro del mismo para hacerlo sonar.
El objetivo del taller fue concienciar sobre la importancia del reciclaje y saber darle otra vida a muchos de los elementos con lo que contamos día a día donde surgieron una gran variedad de ideas e instrumentos realizados con muchos materiales que no solemos pensar que pueden tener otro uso.
Pienso que fue una oportunidad bastante buena en la que pudimos conocer y concienciarnos sobre la importancia del reciclaje así como la creación de instrumentos que nos puede servir bastante cuando ejerzamos de docentes, ya que no necesitamos tener muchos recursos para construirlos y enseñarlos a nuestros alumnos/as e incluso fabricarlos con ellos mismos.
Me gustaría compartir una intervención que realicé la semana pasada en una de mis clases prácticas de Educación Infantil. Mi aula de alumnos de 5 años practican diariamente la relajación "Mindfullness" tras el recreo, ya que regresan a clase un poco agitados y necesitan unos minutos de vuelta a la calma para retomar su jornada de manera óptima. En el tiempo que llevo de prácticas pude observar que las canciones elegidas para la relajación eran poco melódicas y lineales, o simplemente eran una secuencia de sonidos de elementos naturales como agua,viento e incluso animales que emitían sonidos repetitivos. Rápidamente, me percaté, que el alumnado se distraía con facilidad con etas secuencias musicales y no dedicaba el tiempo empleado a que el cuerpo entrase en un estado de relajación.
Por ello, la semana pasada me hice cargo de las sesiones de relajación y de la elección musical. Se me ocurrió que el momento de relajación fuera también un momento de disfrute y aprendizaje, así que pensé en utilizar canciones de Bandas Sonoras de películas. Las músicas en las películas tienen una labor, una finalidad, y en algunos casos, con el paso del tiempo, las músicas consiguen tener tanta presencia como la propia historia en nuestra memoria.
Así pues, consideré oportuno utilizar una en concreto: "The seal lullaby". Esta preciosa obra del compositor Eric Whitacre fué en principio compuesta para una película de Disney que nunca llegó a realizarse. La supuesta película trataba de una pequeña foca que se pierde de su mamá en el océano; y la música en cuestión, es una nana que le canta la madre foca a su hija.
Esta BSO es una maravilla, y te da juego para que los niños se interesen por su música a la vez que le cuentas un poco sobre de dónde surge esta canción y les explicas que íba a ser la canción principal de una pelicula de Disney que nunca llegó a realizarse. Con esto captas su atención, y además, mientras que ellos la escuchan muy atentos vas comentando la traducción de la canción, para que entre de lleno la imaginación y puedan pensar en como sería la pelicula en sus cabezas.
Por otra parte, al ser una nana, ayuda a la relajación e invita a crear un ambiente de aula agradable. Las nanas y canciones de cuna han sido siempre el método elegido para relajar, descansar y dormir a los niños/as. En definitiva, he podido comprobar que la sesión fué muy acertada, los niños se relajaron por completo y les encantó la historia.
Aquí os dejo un vídeo de la BSO " The seal lullaby":
Y también os facilito la letra y su traducción:
Texto y traducción.
The seal lullaby:
Oh! Hush thee, my baby, the night is behind us.
and black are the waters that sparkled so green.
The moon o'er the combers, looks downward to find us.
At rest in the hollows that rustle between.
Wher billow meets billow, then soft be thy pillow.
Oh wery wee flipperling, curl at thy ease!
The strom shall not wake thee, nor shark overtake thee
asleep in the arms of the slow swinging seas.
Nana de la foca:
Oh! silencio, hijo mío, la noche está tras nosotros.
Y negras son las aguas que tan verdes brillaban.
La luna, sobre las olas, mira hacia abajo para encontrarnos
Descansando en los huecos que susurran entremedio.
Donde las olas se encuentran, será blanda tu almohada.
Oh! mi pequeño y cansado " aletitas", acurrúcate a gusto!
La tormenta no te despertará, ni el tiburón te alcanzará
Dormido en los brazos del suave balanceo de los mares.
Han sido numerosos los instrumentos musicales
aparecidos en la historia del ser humano. Pero hasta el siglo XIX no se pudo
confeccionar una colección sistemática de instrumentos musicales. En la
actualidad, los instrumentos musicales de orquestación se clasifican a través
de 3 familias: cuerda, viento y percusión. El uso de instrumentos musicales de
orquestación dentro del aula debe potenciarse en la etapa de Educación
Infantil, ya que favorece el reconocimiento de los sonidos que producen, además
de cumplir con el principio de creatividad, que es el objetivo fundamental de
la educación musical.
La producción de sonidos en el aula
de Educación Infantil a través de instrumentos musicales, suele ser atrayente
en el alumnado. Son numerosos los instrumentos
musicales dentro del aula de Infantil, se clasifican en:
oInstrumentos de sonido determinado: emiten
sonidos con diferentes alturas y construyen una melodía, como por ejemplo:
carrillones, xilófonos, metalófonos o timbales.
oInstrumentos de sonido indeterminado: Son
instrumentos que emiten un sonido único, indefinido en altura y subraya el
ritmo de una obra musical, como por ejemplo: cascabeles, triángulos,
panderetas, platillos…
Actualmente, dentro de las aulas de
Educación Infantil se suelen construir instrumentos musicales por medio de
materiales de desecho o reciclados, llamados cotidiáfonos. Por medio de estos
instrumentos reciclados, el alumnado es capaz de descubrir nuevas posibilidades
sonoras, además de reforzar el reciclaje en Educación Infantil.
Este post tiene como origen las últimas actividades prácticas realizadas en clase donde hemos podido trabajar de manera dinámica diferentes canciones y coreografías donde se trabaja con los niños y niñas el ritmo, la coordinación, el movimiento, etc. Por esta razón he querido destinar este post semanal a el ritmo y su importancia en la expresión corporal para trabajar la música en el aula.
Poseer y sentir el ritmo es algo muy natural en el ser humano por lo que éste, se encuentra presente en la mayoría de juegos infantiles.
El ritmo tiene el valor de ser un regulador admirable de los centros nerviosos, facilitando la relación entre las órdenes del cerebro y su ejecución por las partes del cuerpo.
La precisión rítmica depende de la capacidad motriz del niño, a la vez que la favorece, es un proceso lento que se ha de ir trabajando progresivamente.
El punto de partida para la educación del ritmo ha de ser el cuerpo, convirtiéndose la maduración motriz en un factor condicionante de la capacidad de expresar sonoramente los distintos ritmos. En este sentido, podemos afirmar que la base verdadera del ritmo se encuentra en el movimiento corporal.
Teniendo en cuenta, el desarrollo psicoevolutivo del niño, encontramos que el ritmo se produce desde la más tierna infancia, ya que el sujeto se entrega a actividades rítmicas de balanceo, de ajuste de objetos o de sincronización. Si realizamos un eje cronológico comprobamos que:
Al año y medio, el niño es capaz de utilizar todo su cuerpo para responder a la música rítmicamente. Hacia los dos años, su motricidad va respondiendo ante el fenómeno musical dando golpes con los pies y moviendo la cabeza.
Con cuatro años el niño va adquiriendo un mayor control motriz de las extremidades inferiores.
Hacia los cinco años, comienza la maduración en el desarrollo musical del niño, empezando a coordinar su propio ritmo y el de la música.
Con seis años la sincronización del ritmo corporal con el de la música será más eficaz.
Algunas consideraciones didácticas del ritmo dependen del movimiento natural del niño que será un punto de partida en el trabajo del ritmo musical. Mediante el ejercicio rítmico, concretado en las canciones, se conseguirá la regularidad de la pulsación.
El ritmo es por tanto, el elemento de la música que incide con más fuerza en la sensibilidad infantil y es a través del movimiento cómo el niño lo percibe. El trabajo del ritmo está dividido en diversos aspectos: Ritmo motriz con o sin sonido (Ritmo corporal) y el Ritmo musical (pulsación y figuras musicales). Estos aspectos se trabajan a la vez.
Por otro lado, las canciones motrices constituyen el medio a través del cual se sintetizan las dos áreas de conocimiento, la educación física y musical. El ritmo tratado a través de las canciones, presenta sus dos aspectos más significativos: el ritmo y el movimiento, y el ritmo y la palabra. Siguiendo el espíritu de la reforma educativa se presenta una metodología basada en la acción y la globalización como elementos básicos del aprendizaje, a través de estrategias lúdicas basadas en la motivación y los intereses de los niños. Las letras que plantean las canciones motrices permiten al niño conectar su aprendizaje con su experiencia cotidiana.
Para los niños, el canto es una necesidad y constituye un acto espontáneo que desarrolla la capacidad de expresión artística y afectiva, contribuyendo al desarrollo global de su personalidad en sus tres dimensiones: física, intelectual y afectiva. En cuanto a la melodía, son sencillas, pegadizas y de fácil memorización. El timbre, es la cualidad del sonido emitido por una voz o un instrumento, que a su vez permite diferenciarlo de otras voces o instrumentos. En las canciones motrices se debe presentar una grabación instrumental de gran variedad tímbrica para que éstas resulten atractivas a los niños.
La metodología de las canciones motrices debe establecer una secuencia para la enseñanza del texto, de las habilidades motrices propuestas, ritmo y melodía para facilitar la tarea final: la entonación de la canción. El procedimiento de la enseñanza de las canciones motrices debe cumplir estas fases:
Establecer un diálogo con los niños en torno al tema central.
Iniciar el trabajo sobre las distintas habilidades motrices: esquema corporal, respiración, relajación, especialidad, temporalidad…
Comentarles a los niños el contenido de la canción.
Le enseñamos la melodía de la canción cantándola con el texto
Realizamos actividades encaminadas al desarrollo de la memoria auditiva.
Se puede cantar realizando el mayor número de matices expresivos.
Para trabajar el ritmo se puede proponer palmear las silabas del texto mientras se canta la canción.
Por último, el planteamiento de las propuestas metodológicas no tiene por qué seguir una secuenciación lineal, ya que se pueden realizar aquellas que metodológicamente se crean más convenientes.
Las actividades de expresión corporal requieren un desarrollo armónico del movimiento en el que deberá manifestarse el ritmo interno de la persona. El objetivo principal es fomentar el gesto como forma de expresión, sin que ello signifique negar la expresividad del niño en otras formas de actividad física.
El niño puede expresar a través del movimiento corporal: subjetividad, ideas, emociones y sentimientos. Subjetividad porque se debe permitir al niño la espontaneidad de los movimientos, evitando la utilización de gestos convencionales y aprendidos. Se proponen actividades en las que deban comunicar emociones, sentimientos, identificándose afectivamente con la situación. Ideas: el niño a través de su cuerpo podrá comunicar un pensamiento o un significado, se estimula su lenguaje gestual proponiéndole que represente una idea a través de su cuerpo.
Con la expresión corporal lo que se consigue es un pleno conocimiento de su propio cuerpo y de las posibilidades gestuales de cada una de sus partes.
2. Aplicaciones didácticas
Para expresar sentimientos, emociones e ideas en niños, debemos posibilitar que sean capaces de conocer su cuerpo, independizar segmentos corporales cuyo movimiento sea significativo, y cargar de tensión una determinada zona corporal. Debemos pues, proponer nuestras actividades de forma que la expresión corporal, el conocimiento y la conciencia corporal avancen paralelamente.
En el inicio de nuestras actividades los niños deben estar tranquilos.
Intentaremos respetar al máximo la espontaneidad en los momentos del niño.
Deberemos entender también, que respetar la espontaneidad y los movimientos del niño, no significa que éste deba moverse libremente según su inspiración.
El movimiento natural del niño será un punto de partida en el trabajo del ritmo musical.
El trabajo del ritmo está dividido en tres aspectos:
-Ritmo motriz: trabajar el ritmo corporal
- -Ritmo musical: pulsación
-Ritmo musical: figuras: musicales.
Estos tres aspectos se trabajan prácticamente a la vez, pero en la etapa Infantil los más importantes serian la concienciación e interiorización de la propia pulsación y la capacidad de sincronizarla a estímulos diversos y a velocidades distintas.
Es preferible que se pueda acompañar estos movimientos haciendo ritmo y melodía y de esta forma, podremos obtener distintas velocidades, así como matices y otras variantes.
A continuación dejo un ejemplo que he podido encontrar en internet sobre un aula de infantil del nivel 0-3 donde se trabaja el ritmo y además como recurso se utilizan instrumentos musicales.